DESEOS DE NAVIDAD

Queridos Perros Magos,

 

Soy Hoss, uno de los veteranos de la prote. Os escribo en nombre de todos mis compañeros porque muchos de ellos ya han perdido la ilusión y otros viven ajenos a la vida que podrían tener fuera de aquí.

 

Este año todos nos hemos portado muy bien en el refugio y hemos sido muy buenos, desde los que llevamos muchos años aquí a los que han llegado en los últimos meses. Es por eso que me gustaría pediros un deseo muy especial: deseo para todos nosotros que en este nuevo año que empieza encontremos una familia que nos lleve a casa y nos dé el cariño que nos merecemos. Porque yo sé que todos nos merecemos vivir en un sitio en el que estar calentitos en invierno, en el que nos den mimos a todas horas y ser necesarios para alguien, sintiéndonos parte de una familia. Todos aquí en la protectora vivimos muy bien: nos dan de comer a diario, salimos a pasear todos los días, tenemos nuestras casetas y camitas y a nuestros queridos voluntarios que día a día se dedican a cuidarnos como si cada uno de nosotros fuéramos también parte de su familia. Pero yo he vivido en una casa y sé que todos nosotros nos merecemos el calor de un hogar.

Por un lado, están mis compis que no han sentido nunca el calor de un hogar y solo conocen la vida en la prote. Para ellos, os pido que por favor tengan la oportunidad de vivir fuera de aquí, porque sé que ellos sabrán recompensar a quien decida hacerles un hueco en su vida. Por otro lado, algunos de mis compañeros ya ni siquiera piensan en que haya humanos buenos fuera de aquí, porque han sufrido tanto que solo confían en los voluntarios que llevan mucho tiempo cuidando de nosotros, pero yo sé que a cada uno de nosotros nos espera alguien ahí fuera, solo necesitamos ayuda para encontrarnos. Para ellos, os ruego busquéis a la persona indicada, alguien especial que les haga volver a confiar en esa especie que un día les quitó la dignidad y les hizo sufrir.

Por último, un deseo general para toda la humanidad: queridos perros magos, me gustaría que las personas se den cuenta de que los animales no somos objetos, somos seres vivos igual que ellos y tenemos sentimientos. Quizás a todos los humanos les haría falta encontrar a su perro gemelo, el que les ayude a darse cuenta de que nosotros tenemos el mismo valor que cualquier persona y que estaremos junto a ellos siempre que lo necesiten, incondicionalmente.

 

Atentamente,

Un perro que aun no ha perdido la esperanza